Qué es el Shiatsu

Shiatsu significa literalmente “presión con los dedos”, Shi-dedo, atsu-presión. Esta presión se ejerce con los dedos pulgares y las palmas de las manos.El Shiatsu es un masaje terapéutico japonés que, a través de sus presiones, estimula las defensas naturales del cuerpo facilitando la autocuración. Se desarrolló en el Japón a principios del siglo XX y fue reconocido oficialmente en el año 1930.

El Shiatsu en sus fundamentos, combina conocimientos de anatomía y fisiología occidentales con las bases fisiológicas filosóficas de la Medicina Tradicional China. Estas presiones se efectúan sobre unos canales de energía que recorren toda la superficie corporal y que se denominan meridianos. Ellos son como redes que vinculan distintas partes del cuerpo entre sí, y en ciertos lugares se profundizan llevando la energía que transportan hacia los órganos y sistemas orgánicos uniendo, por así decirlo, la superficie del cuerpo con el interior del mismo. De esta manera el Shiatsu, actuando sobre la piel y los músculos, puede influir en el funcionamiento de los órganos. Por el tipo de presiones que se usan, el Shiatsu estimula el Sistema Nervioso Parasimpático, que es el sistema relajante del cuerpo y que activa el sistema inmunológico movilizando las defensas y otorgando una sensación de bienestar.

El Shiatsu es un tratamiento integral y holístico. Cada vez que se realiza un tratamiento se trabaja todo el cuerpo debido a que el tratamiento local, generalmente, tiene efectos temporales sobre los síntomas y no llega a curar la causa.

Recibido con regularidad, tiene un efecto preventivo y sirve de mantenimiento una vez conseguido el reequilibrio, ya que al trabajarse todo el cuerpo, no sólo se trata el problema sino también su causa. El mecanismo de autocuración innato que poseemos es activado mediante la aplicación de esta técnica cuya efectividad será más o menos rápida dependiendo del estado de cada paciente, de su edad, de sus hábitos y de su confianza en el tratamiento.

Efectos del Shiatsu

Los efectos de Shiatsu son más amplios y complejos que los del masaje convencional, pues además de calmar tensiones y dolores musculares, estimula el flujo de las energias vitales y ayuda a que el paciente restaure el equilibrio entre cuerpo y mente, y en un estado de armonia natural, reactiva su capacidad de autocuración.
El Shiatsu ve las enfermedades como la consecuencia de un desequilibrio interno, por eso trata todo el cuerpo. El profesional de Shiatsu sabe que, a veces, la causa del dolor no se encuentra donde éste se manifiesta, y un tratamiento localizado puede tener tan solo un efecto temporal. Así el Shiatsu trata todo el cuerpo para eliminar, además del efecto, el origen de muchas molestias.

En las palabras del gran Maestro Tokujiro Namikoshi, fundador de esta terapia en Japón: “Shiatsu es como el amor de una madre, la presión sobre el cuerpo estimula la fuente de la vida”.
Alivia las tensiones musculares; calma la mente;alivia dolores articulares; produce tranquilidad, paz interior y sensación de contención.

Indicaciones y Beneficios del Shiatsu


Indicaciones del Shiatsu:

  • Estrés, ansiedad, agitación, nerviosismo
  • Dolores de cabeza: cefaleas, migrañas
  • Dolores de espalda, lumbalgias, ciática, tortícolis, cervicales, contractura muscular
  • Trastornos gastrointestinales
  • Desordenes menstruales
  • Trastornos ligados a la menopausia
  • Insomnio· Fatiga crónica y Fibromialgia
  • Agotamiento físico
  • Depresión


Beneficios de Shiatsu:
  • Mejora el funcionamiento general del organismo
  • Aumenta el rendimiento físico e intelectual
  • Eleva el tono vital
  • Libera tensiones
  • Estimula la circulación de líquidos corporales, sistema linfático y hormonal y la eliminación de toxinas
  • Equilibra el sistema nervioso
  • Equilibra el sistema respiratorio
  • Elimina el estrés tanto físico como emocional
  • Favorece la circulación sanguínea (vitaliza la piel y disminuye la aparición de arrugas)
  • Mejora la digestión
  • Tonifica los músculos, articulaciones y tendones
  • Produce una profunda relajación que beneficia el estado psicoanímico

Cómo es una sesión de Shiatsu


El Shiatsu se recibe en el suelo sobre un futón o colchoneta al estilo japonés, en un ambiente tranquilo y acogedor para que el paciente pueda recuperar la calma interior.
El ambiente en la sala debe estar a la temperatura necesaria para que el paciente no sienta nada de frío ni tampoco calor excesivo. La música adecuada y la luz tenue colaboran durante la terapia para facilitar la relajación del paciente y lograr una sensación de bienestar.

La terapia se recibe con el paciente vestido con una ropa fina y flexible (chándal de algodón o similar) lo que da una sensación de comodidad. No se usan ni aceites ni cremas.
Durante la sesión de Shiatsu no es conveniente hablar. Todas las consultas e indicaciones deberán ser hechas antes o después de la terapia, a excepción de pequeñas indicaciones al paciente para que se de la vuelta, o para que el paciente le haga notar al terapeuta una zona especialmente sensible a la presión.

La relación entre terapeuta y paciente está basada en una ética profesional que respeta y protege toda la comunicación establecida durante la sesión.

La experiencia de una sesión de Shiatsu

Para muchas personas la primera sesión de Shiatsu es una experiencia muy poderosa: “una experiencia increíble”; “tiene un efecto asombroso, estaba tan k.o.... tenia un efecto abrumador”.

Algunas personas comentan que “sienten el movimiento de la energía” o “visualizan colores” o tienen la sensación de estar “flotando, de no tocar el suelo”.

Por lo general se siente una profunda relajación, se consigue entrar en un estado de meditación producido por el cambio en el estado de la respiración ya que el Shiatsu induce al paciente a realizar una respiración abdominal calmada y profunda, y equilibra su sistema nervioso autónomo a una respiración profunda y relajada.
Otras personas necesitan mas sesiones para sentir todo el efecto, ya que al principio tienen dificultad para relajarse.

Durante el tratamiento generalmente se experimenta bienestar y somnolencia, seguido de un estado de relajación y de vigor energético.

Efectos de una sesión de Shiatsu

El Shiatsu no tiene efectos secundarios, debido a que la presión de los dedos se modulan produciendo sensaciones agradables en el cuerpo.
Puede suceder que tras recibir una terapia de Shiatsu aparezcan reacciones en el paciente de corta duración como: agujetas, cansancio, alteraciones del sueño, dolores de cabeza, aumento de la diuresis, pero no son más que "reacciones de curación” que suelen durar unas 24 horas. Estas reacciones son beneficiosas e indican el inicio de la autocuración.

En determinados tratamientos se produce una reacción de desintoxicación del organismo que una vez superada permite al organismo recuperar la salud.

Dependiendo de la gravedad de los síntomas es frecuente que la primera sesión de Shiatsu que se le realiza a un paciente le produzca un agravamiento de los síntomas y unas molestias generales. A este agravamiento le llamamos "Crisis curativa" e indica que la terapia aplicada es la apropiada para el paciente, es en estos casos cuando más debemos confiar en la capacidad profesional del terapeuta y continuar con las sesiones de Shiatsu, pues es precisamente la fuerza de los síntomas de esta crisis la que marcará la eficacia del tratamiento aplicado.

En cualquier caso y conforme el tratamiento va avanzando y el paciente comienza a recuperar su equilibrio vital, las sesiones de Shiatsu son muy agradables de recibir, provocando siempre relajación y mejora de la vitalidad en general. Es en este punto cuando se recomienda al paciente que no deje de recibir Shiatsu, pues una mejoría no indica una curación completa que requerirá algunas sesiones adicionales.

Una vez que el paciente ha finalizado con éxito su tratamiento el Shiatsu puede seguir siendo útil al paciente para prevenir la aparición de nuevas enfermedades y mejorar su estado anímico y rejuvenecerle.

En realidad, el mejor momento para acudir a un Shiatsu es cuando estamos sanos, cuando no tenemos dolores ni molestias, lo que nos permitirá fortalecer nuestra salud y el sistema inmunológico hasta el punto de que no aparezca ninguna enfermedad ni sufrimiento en nuestra vida.


Las sensaciones más comunes después de una sesión de shiatsu son:

1.- Sensación de calma y descanso, que puede durar todo el día y dar como resultado final un sueño profundo y reparador.
2.- Relajación, debido a que el sistema nervioso libera las tensiones y permite que mente y cuerpo se relajen y descansen.
3.- Aumento de vitalidad que permite llevar a cabo el trabajo del día con agilidad.
4.- Alivio del dolor, los síntomas tienden a desaparecer. El Shiatsu aumenta el poder autocurativo del cuerpo aliviando el dolor sin producir efectos secundarios.

Cómo actúa el Shiatsu

A lo largo y a ambos lados de la columna vertebral salen raíces nerviosas que cumplen múltiples funciones como mantener el equilibrio de las funciones orgánicas, circulatorias, digestivas, endocrinas, así como el tono de los músculos y el estado general de bienestar emocional.

Los estímulos producidos por el Shiatsu viajan en dirección centrípeta (entrando por la médula espinal), hasta el sistema nervioso central (a través del nervio sensorial), donde estos estímulos provocan la secreción de opiáceos endógenos (endorfina, etc.) para paliar dolores, que en dirección centrifuga llega hasta el órgano para que este comience el proceso de autocuración.

El Shiatsu regula y equilibra el Sistema Nervioso Autónomo, se reduce el estrés, se desbloquean tensiones tanto físicas como emocionales, se desintoxica el organismo dándole una oportunidad al Sistema Inmunológico para que comience a trabajar elevando las defensas vitales, y dándole al cuerpo una oportunidad y un espacio para que empiece a funcionar con mayor cantidad de energía vital.

Por el tipo de presiones que se usan, el Shiatsu estimula el Sistema Nervioso Parasimpático, que es el sistema relajante del cuerpo, al presionar en profundidad, los nervios que recorren ambos lados de la columna, equilibra éste sistema, volviendo la respiración más profunda y relajada.

A nivel bioquímico también se produce una serie de cambios: elimina el ácido láctico y el dióxido de carbono, que, al acumularse en los tejidos causa la contractura muscular y la disminución del riego sanguíneo. Al disminuir toda ésta acumulación de substancias tóxicas se restaura la flexibilidad corporal y se alivia el dolor, disminuyendo el cansancio y la fatiga así nos encontramos más relajados, abiertos y optimistas.

Realmente lo esencial es la respuesta de nuestro cuerpo a las presiones digitales mantenidas por un determinado tiempo, que logran un efecto sedante o tonificante sobre los tejidos a través del sistema nervioso parasimpático.